Palacios y su adios al futbol

Adiós a un grande

Roberto Palacios, ese pequeño/gran jugador que hizo vibrar a todo el Perú con sus espectaculares goles, ese pequeño/gran jugador que sudó la camiseta nacional como nadie, ese pequeño/gran jugador que nadie quiere que cuelgue los chimpunes, lo hizo. Se nos fue. Debe haber sido la decisión más difícil que haya tomado. Él hubiese querido seguir defendiendo la blanquiroja hasta con el alma, de eso estamos seguros. Lamentablemente los años pasan y pesan, y eso lo sabe bien el buen Roberto.

Estoy seguro qué nadie le puede reprochar algo a Palacios. Fue el jugador más querido de nuestra pobre selección en la década pasada. Sólo queda la amargura y sensación de que el popular “Chorri” merecía más alegrías. No tuvo logros importantes con la selección, tampoco con el club de sus amores (Sporting Cristal), sólo grandes partidos y grandes goles que quedarán grabados en las retinas de los aficionados  que pudimos disfrutar de él.

Dijo adiós al fútbol un sábado 11 de febrero del 2012 en un partido en donde no importaba el resultado. El 0-0 ante la San Martín, quedará en la anécdota de que en la despedida del hombre de los golazos, no se marcó ninguno. Es que acaso nadie estaba a la altura del “Chorri”, nadie podía emular a este soberbio rematador de media distancia.

Roberto Palacios se fue dejando huella, no sólo en el fútbol peruano. En cadenas internacionales, resaltaban las virtudes y talento del, ahora, ex jugador peruano y, a la distancia, se sumaban a los homenajes, diciéndole ¡HASTA SIEMPRE MAESTRO! Estamos seguros que su amor por el Perú es tan grande, que algún día volverá por la puerta grande a querer dirigir al equipo de la franja, y esta vez sí obtener logros importantes para alegría de todos. Desde aquí sólo me queda desearle lo mejor en esta nueva etapa de su carrera ligada al fútbol. Como ganador que es, sabemos que lo logrará.