COPA LIBERTADORES

LA COPA LIBERTADORES ES SU DECEPCIÓN

De la obsesión a la decepción. Tenían todo servido para celebrar. Estadio lleno, ventaja (1-3), en el resultado de ida y el rival, Capiatá, no parecía ser de mayor riesgo. El conjunto paraguayo es relativamente nuevo en el contexto futbolístico continental y eso lo hizo más peligroso. Muy peligroso.

No quiero pensar que Universitario ha armado un equipo que dependa de Juan Vargas. El popular “loco” no fue de la partida porque quiere estar al ciento por ciento para este domingo cuando se juegue el clásico ante Alianza Lima. La confianza o, mejor dicho, el exceso de confianza del comando técnico, hizo pensar que su ausencia pasaría desapercibida y la clasificación sería sólo mero trámite. ERROR. Tenían enfrente a paraguayos. Los que vimos el partido vamos a estar de acuerdo que la famosa garra de que está precedida el cuadro crema es sólo un espejismo ante lo mostrado por los jugadores guaraníes. Literalmente dejaron el alma en cada jugada, en cada pelota dividida. Sabían que de otra forma no era posible la hazaña. Los gatitos locales fueron devorados por unos verdaderos leones que demostraron una vez más que el fútbol moderno, el fútbol competitivo, ese que consigue resultados históricos en cualquier cancha es el que se juega en todo el mundo. No aquí. Pena, vergüenza, decepción… Pero la visita no sólo fue garra. También jugó, y bien. Un resultado muy justo por lo hecho casi todo el partido. Salvo un par de disparos de Manicero y Guastavino, el equipo rayado no pasó sustos y jugaron a su ritmo.

Una lástima lo ocurrido en el Monumental porque la expectativa era grande. Iniciar la Copa Libertadores con una eliminación decorosa del Deportivo Municipal (jugando muy bien, sobretodo de visita), y una casi segura clasificación de la “U”, alentaba a un país que sigue ávido de buenos resultados, esta vez por parte de clubes para confirmar un ligero crecimiento futbolístico que sea un reflejo de lo que muestra la selección nacional. La gran inversión que ha hecho el cuadro de Ate no le garantiza el éxito. Es más, está decepcionando por lo mostrado hasta hoy, si tenemos en cuenta que se armaron para, por lo menos, pasar esta instancia y asegurarse un buen ingreso de dinero a sus arcar y empezar a recuperar lo invertido. Ahora están más que obligados a ser campeones nacionales y limpiarse la cara. ¿Se podrán levantar ante su más enconado rival? Linda oportunidad para hacerlo.